La limpieza y desinfección de los espacios públicos y comunes se ha convertido en una prioridad para prevenir la propagación de enfermedades e infecciones, especialmente en un contexto en el que el 80% de las enfermedades se transmiten a través de las manos. Sin embargo, el uso de desinfectantes no es suficiente para garantizar una protección total, ya que su eficacia es limitada en el tiempo y depende de la frecuencia de limpieza y del nivel de uso y tráfico en el espacio. Por eso, es necesario contar con otras medidas de higiene y seguridad que complementen la acción de los desinfectantes y protejan tanto a los usuarios como a los operarios de limpieza.
En este sentido, el guante alto representa una revolución en el mercado de la higiene profesional al ser el primer guante que ofrece una acción antimicrobiana permanente. Gracias a la tecnología mineral activa que contiene, es capaz de eliminar el 99% de los virus y bacterias que entran en contacto con su superficie.
El guante alto es una innovación revolucionaria en el mundo de la higiene profesional. Ha sido reconocido por profesionales de la limpieza en todo el mundo y ha sido seleccionado como finalista al ‘Producto Innovador del Año’ en los Cleaning Excellence Awards, uno de los premios más prestigiosos en el sector de la higiene profesional.
Este reconocimiento no es meramente simbólico; deriva de la capacidad del guante para ofrecer una solución eficaz y duradera para los riesgos a los que se enfrentan diariamente los operarios de limpieza, como la contaminación cruzada o la exposición a microorganismos perjudiciales para la salud. Este guante asegura la protección del operario de limpieza contra virus y productos químicos agresivos comunes, además de limitar el riesgo de contaminación cruzada de superficie a superficie para los usuarios de las instalaciones.
